lunes, 22 de octubre de 2007

Tirita versus condón

Había visto mil veces por el metro esta campaña institucional en la cual se promueve el uso del preservativo a través de muestras gratuitas que cualquiera puede conseguir en determinados puntos de la ciudad. Casualmente, el otro día fui a un bar de esa lista y me encontré este jarrón de cristal:
Ahí están, para que todos los cojan (cojamos) a voluntad. A puñados, si quieres. Es más, los preservativos vienen en paquetes de dos, lo cual, ahora que lo pienso, es una enorme responsabilidad para cualquiera que se plantee triunfar una noche.

El caso es que cogí unos cuantos (por supuesto, con afán informativo para esta entrada) y al llegar a casa, los examiné. ¿Sería yo capaz de utilizar un condón que hubiese cogido en un bar? ¿Qué pasaría si fuese defectuoso? Pude ver en el anverso escrito "Product of Malaysia", lo cual me hizo plantearme cómo estaría la tasa de natalidad en Malasia. Pude investigar que está en 3'07 niños por mujer, con un crecimiento de la población del 1'78% anual.

Hay quien piensa que llevar siempre un condón encima puede garantizar el éxito a la hora de ligar; que da motivación y todo eso... Sinceramente, yo no lo creo. Cuando llevas un condón en la cartera y llevas mucho tiempo sin comerte un rosco, para cuando vayas a usarlo, tal vez esté dañado. Y desde el mismo momento en que te lo pones, ya te quedas intranquilo, nervioso. Tus posibilidades de hacer pleno al quince se reducen drásticamente.

A mí no me funciona eso de llevar un condón en la cartera. Nada de eso, ¡qué va! Lo mejor para ligar (apuntad, chicos) es llevar una tirita. Sí, las chicas se ponen incómodos tacones para estar divinas, pero a mitad de la noche están que no pueden más con sus pies (especialmente en las bodas). Y tarde o temprano, a lo largo de la noche, tendrán un descuido y se reajustarán los zapatos con expresión de dolor en la cara. En ese momento, te acercas a ella, sacas triunfante la tirita de la cartera y le dices: "Toma, baby".

Las tiritas, sin embargo, no evitan el contagio de enfermedades de transmisión sexual (aunque en función de dónde te las pongas, puede que sí; está por demostrar). Los preservativos siguen siendo la mejor forma para eso, y la iniciativa de la ciudad de Nueva York me parece ejemplar.


OLI I7O

5 comentarios:

Seli dijo...

Creo que lo de la tirita sólo funciona el 31 de diciembre. Para el resto de los días es mejor un sugus o un chicle de fresa :p

Anónimo dijo...

Aunque no he podido ver la campaña institucional porque estoy escribiendo desde un ordenador de una institución y me lo ha filtrado. Muy buena campaña,sí!!

Yo no usaría la de Malaysia, pues..

En cuanto a la tirita yo siempre llevo unas Compeed*.Sin embargo agradecerìa el detalle.

Y supongo que ese tipo de zapatos no está hecho para mucho caminar..o sea que será mejor llevar ambas cosas ;)

El Contra dijo...

Un condon... Una tirita... Bah!! metodos demasiado arriesgados, lo que te asegura un triunfo seguros se llama VISA ORO.

Guardagujas dijo...

Supongo que el dilema condón vs tirita es como el clásico tanga vs fajapantalón... Llegado un momento el primero es más útil, claro que para propiciar ese momento más vale contar con el segundo.

Sin duda, gana la tirita. Siempre te puedes hacer con un condón en el transcurso de la noche. Imaginemos la situación inversa:

- No tendrás una tirita ¿verdad?
- No, pero ven pa'cá que te vas a olvidar del dolor de pies.

Pues no, no triunfa nada.

Stipey dijo...

Hasta no hace mucho me llamaba mucho la atención una caravana que suele estar "aparcada" junto al mercado de Fuencarral en la calle Idem, lo que empezó siendo una especie de "barraca" en los días del orgullo, ha acabado siendo un sitio donde los adolescentes, tanto heterosexuales como homosexuales pueden conseguir anticonceptivos de manera gratuíta (y segura) sin ningún tipo de pudor.

Servidor que además los sigue usando y tiene sobrin@s en edad de "merecer" le parece algo muy acertado.

Como digo siempre, no digo que no se haga, sino que se pongan medios.

Un abrazo Pa.

P.D: Te acabo de enviar un mail con algo que quiero que veas con tu mayor interés posible.